LENTILLAS… ¿DESDE QUÉ EDAD?

Hay temporadas que mis clientes se preocupan más por unos aspectos que por otros relacionados con la óptica.  Últimamente, la pregunta de ¿desde qué edad puede llevar lentillas mi hijo? se ha convertido en muy habitual, quizá también porque llega el buen tiempo, así que aquí va mi punto de vista.

Las lentillas pueden utilizarse desde que nacemos, de forma autónoma hay muchos autores que indican que “desde que el niño sabe atarse el cordón de los zapatos” pero, ¿a partir de cuándo es conveniente utilizarlas? Pues depende de varias cuestiones:

  • De la graduación del niño (miopía, hipermetropía, astigmátismo) y de cuánta graduación.
  • Di si hay desviación ocular (estrabismo) o no lo hay.
  • De la diferencia de graduación entre ambos ojos.
  • De las preferencias de los padres.
  • De si es necesario su uso preventivo o terapéutico o sólo se usa como corrección.
  • Por supuesto del estado de la córnea, párpados, conjuntiva y calidad de la lágrima.

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MIOPES

Desde que han ido saliendo estudios que demuestran que el uso de determinados tipos de lentes de contacto ayudan a prevenir el aumento de la miopía, parece evidente pensar que cuanto antes mejor, pero podemos ponernos varios puntos de partida, no todo vale para todo el mundo:

  • Tener 5 años.
  • Que la miopía haya aumentado en las dos últimas revisiones semestrales, es decir, dos aumentos de graduación en el mismo año.

Teniendo en cuenta que si se van a utilizar para el control de miopía el método de corrección principal debe de ser la lente de contacto y no la gafa y por supuesto no estamos hablando de una lente de contacto estándar sino una adaptada a esta terapia.

En estos casos el seguimiento por parte del profesional debe de ser como mínimo semestral para asegurarse de

  • La salud de las estructuras oculares.  Córnea, conjuntiva, párpados.
  • Que la lente de contacto siempre esté perfectamente adaptada e interfiera de la menor manera posible.

HIPERMÉTROPES 

A partir de los 9 años, y en estos casos mi consejo es:

  • NUNCA si hay un estrabismo que se manifiesta al usar las lentes de contacto.
  • De forma puntual, para hacer deporte, fines de semana,…

En este caso, el método de corrección principal  será la gafa.

ASTIGMATISMO

En caso de astigmatismo hipermetrópico seguiremos las indicaciones para hipermétropes y en caso de astigmatismo miópico seguiremos las indicaciones de los miopes.

Pero hay otros usos de las lentes de contacto, a veces menos conocidos pero muy útiles:

  • Para corregir diferencia de graduación entre los dos ojos evitando así el desarrollo de ambliopía (ojo vago).  Incluso cuando ya se ah desarrollado, ayuda en en la terapia de recuperación de ese ojo.  En estos casos cuanto antes mejor.
  • En terapias de ambliopía, cuando el parche en el ojo “bueno” es traumático para el niño, difícil de mantener puesto, incómodo por alergias,… la solución son las lentillas de “pupila negra” con ellas, el ojo queda tapado sin que estéticamente quede mal.

Toda esta información está basada en mi experiencia profesional, los artículos que se publican al respecto y la formación que he ido adquiriendo.  Sin embargo, estamos hablando de la salud ocular de los niños, y es por eso que me parece importante